PORTAZGO S.D. 4 - 3 CURTIS

El Portazgo sumó su primera victoria de la temporada a costa del peleón Curtis, en una tarde con un triste protagonismo arbitral. Los cullerdenses remontaron un 1-3 adverso en la segunda mitad para salir de los puestos de descenso.

Después de tres derrotas consecutivas ya no existía margen de error, y menos contra otro equipo nuevo en la categoría. Y las cosas empezaban de la mejor manera posible para los intereses rojiblancos. Luis metía un buen pase interior para Kun, que avanzó por la izquierda y soltó un latigazo imposible de detener para el arquero rival.

El partido se convirtió a partir de ese tempranero gol en un toma y daca hasta que el colegiado decidió intervenir. El mismo árbitro que había dejado su huella en la reciente visita a Larín señaló pena máxima en un simple forcejeo a la salida de un córner. Manuel paró el lanzamiento pero no pudo hacer lo mismo con el rechace. Esta igualada sentó como un jarro de agua fría, y tras un balón perdido en campo propio, el Curtis encontraba un espacio en la zaga cullerdense para adelantarse en el marcador.

Con esa ventaja enemiga se llegaba al descanso, después de que el señor de negro volviese a las andadas con una acción que no dejaba lugar a dudas para todos los presentes. Una agresión en toda regla de su delantero centro, que el colegiado pudo ver perfectamente y ante la cual prefirió mirar a las nubes. Ni señaló falta, consciente de que era una roja como una casa.

El Portazgo tenía que salir a dejarse la piel en el segundo acto, pero la situación se torció un poco más. El irregular estado del terreno jugó una muy mala pasada a Manuel, que encajó el tercero cuando se disponía a atrapar plácidamente una falta lejana. La alegría visitante duró bastante poco, porque Dani enviaba el balón a la red tras hacerse con él en el área tras una acción colectiva por la izquierda.

Entonces, y con mucho tiempo por delante, el cuadro local se echó hacia delante con todo, incluyendo el esperado re-estreno de George con la elástica rojiblanca. Precisamente, el recién incorporado estuvo a punto de anotar en dos ocasiones, una de las cuales fue repelida por el larguero. La insistencia obtenía su premio cerca del final, y Nico marcaba su primer gol liguero tras enchufar el despeje del meta del Curtis a disparo de Kun.

Con el partido a punto de finalizar, el silbato arbitral emergió de nuevo, esta vez para la total desesperación visitante. Una acción extraña, que parecía un simple choque entre el portero y Quintela, fue interpretada por el colegiado como penalti y expulsión, ante la incredulidad de todos los asistentes. Dani lo transformó y selló el primer triunfo del Portazgo, que este fin de semana visita el campo del Santa Cruz, contrincante la temporada pasada en Tercera.