El Portazgo redondeó un inolvidable 15 de abril con una incontestable victoria sobre el Sigrás por 5-1, que unida al empate del Obrero en campo del Suevos permite a los rojiblancos depender de sí mismos para obtener el campeonato y el ascenso a Segunda Autonómica.
El partido se puso muy favorable nada más arrancar, con dos goles antes del minuto 10 y la expulsión del portero visitante por aireadas protestas. El primero fue obra de Dani, que finalizó una buena internada de Kun por la derecha. Poco después, Matías sorteaba a varios rivales y sacaba un fuerte chut raso que el meta apenas pudo despejar. Yuki estaba allí para empujarla a la red.
El Sigrás, sin nada que perder, empezó a desperezarse a medida que avanzaba el reloj, pero Kun aniquiló sus esperanzas con un gran lanzamiento de falta que dibujó una bonita parábola descendente. Al descanso se llegaba con esa triple renta, mientras los aficionados y lesionados permanecían pendientes de Alex, enviado especial a Suevos.
Como era de esperar dada la superioridad numérica, el Portazgo se lanzó a por más en la segunda mitad. Y lo consiguieron. Los dos protagonistas del primer tanto se asociaron de nuevo, pero esta vez intercambiando los papeles de asistente y goleador, y Yuki golpeaba otra vez con un gran movimiento dentro del área y un disparo desviado por un defensa hacia su portería. Los visitantes, que habían avisado con ciertas llegadas peligrosas, maquillaron el resultado cerca del final.
Ya con los jugadores en el vestuario se recibía la noticia del empate entre Suevos y Obrero, un resultado que deja todo en manos del Portazgo de cara a los últimos compromisos del curso, frente a Unión Campestre y Pastoriza. Dos triunfos más de los nuestros supondrían el salto de categoría.
Once del Portazgo: Iván, Toni, David, Quintela, Gago (Basanta), Marcos, Matías (Oubel), Kun, Dani (Eirís), Yuki (Richard) y Luis (Samuel).
Por Gabri G. Enriquez
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